Damos la enhorabuena al Club de Fútbol de Vila-real, que el miércoles se convirtió en el campeón de la Europa League, el primer título de su historia, al vencer al Manchester United tras un partido que acabó en empate y que, finalmente, ganó después de 22 interminables, angustiosos y a la vez motivadores, penaltis.
Esta es una gran gesta que merece nuestra atención, porque el Villarreal es un club coherente, con una trayectoria en ascenso continuo, pero que cimenta sus resultados en un trabajo hecho desde la base, sin dejar de lado a su fértil cantera, que ha convertido en los últimos años a su equipo juvenil, en uno de los mejores del panorama estatal.
Y nos gustaría señalar, que en la línea de este trabajo bien realizado, el club apostó por contratar para su escuela de fútbol base, a educadores/as sociales para trabajar esos aspectos más humanos que le hacen destacar entre el resto de los equipos.
El 'Submarino Amarillo' se aleja del común mal de presumir sin poseer y ha dado la vuelta a la tortilla, que educando en valores a sus canteranos, no solo forma futbolistas, sino que también cultiva personas.
Reiteramos nuestra enhorabuena, y les deseamos otros muchos éxitos, sin abandonar esa coherencia y ese saber hacer que marca la diferencia. Gracias Villareal.
